Acceso a la cuenta de correo de un abogado fallecido alojada en el servidor de un Colegio profesional, donde pueden constar datos sometidos a secreto profesional. Como no existe ninguna previsión sobre el destino de los datos, se recomienda que las personas implicadas, de común acuerdo, o el propio Colegio profesional, designen a una persona sometida al secreto profesional y bajo un compromiso de confidencialidad, para que separe la información que forma parte de la actividad profesional del difunto, que se debería entregar a los socios del despacho, y el resto de la información, que tendría que entregarse a los herederos. En el caso de que ello no fuera posible, se recomienda devolver a las personas remitentes los correos recibidos desde la última vez que se accedió a la cuenta de correo.