La Autoridad Catalana de Protección de Datos (APDCAT) ha publicado la Recomendación 2/2023, para advertir a las entidades de su ámbito de actuación que es necesario tener en cuenta la relevancia de funciones a desarrollar a la hora de fijar los precios del contrato de los servicios de delegado y delegada de protección de datos personales (DPD) para ajustar la contratación a la normativa. Esto después de constatar licitaciones en las que se ha tenido en cuenta exclusivamente el factor precio e, incluso, se ha establecido un valor estimado del contrato notoriamente bajo en cuanto a la actividad a desarrollar.
La APDCAT recuerda también que la contratación de este tipo de servicios, por su relevancia, no puede limitarse exclusivamente a criterios económicos (precio más bajo), sino que, además, hay que tener en cuenta criterios cualitativos. En este sentido, el Reglamento general de protección de datos requiere que se designe esta figura atendiendo a sus cualidades profesionales y, en especial, a los conocimientos especializados del derecho, a la práctica en materia de protección de datos ya la capacidad para ejercer las funciones encomendadas.
Un DPD en todas las administraciones públicas
La norma obliga a todas las administraciones públicas a designar un delegado o delegada de protección de datos para velar por el cumplimiento de estos principios en las organizaciones, y en algunas privadas de acuerdo con su actividad. Esta figura debe participar de forma adecuada, y en tiempo oportuno, en todas las cuestiones relativas a la protección de datos dentro de la entidad.
Al menos entre sus funciones está la de informar y asesorar de sus obligaciones a la entidad responsable o encargada del tratamiento de datos, y la os empleados que se ocupan de ellos; supervisar el cumplimiento de lo dispuesto en la normativa en materia de protección de datos personales, incluida la asignación de responsabilidades, la concienciación y la formación del personal que participa en las operaciones de tratamiento y las auditorías correspondientes. También debe ofrecer el asesoramiento que se le pida sobre la evaluación de impacto relativa a la protección de datos y supervisar su aplicación; cooperar con la autoridad de control que corresponda, y actuar como punto de contacto con esa autoridad.
Impulso y reconocimiento de la figura del DPD
La APDCAT trabaja para dotar de herramientas y recursos a los DPDs en Cataluña, una figura clave para la correcta aplicación de la normativa de protección de datos a las organizaciones. Así, recientemente ha puesto en marcha 'DPD en xarxa', la primera red de aprendizaje y colaboración de DPDs en Cataluña, con el objetivo de promover la formación, interacción y cooperación entre las personas que desempeñan esta función en las organizaciones catalanas de su ámbito.
También organiza regularmente cursos y talleres de especialización destinados a este colectivo, con el apoyo de la Escuela de Administración Pública de Cataluña.
La Autoridad Catalana de Protección de Datos ha publicado una nueva recomendación después de detectar licitaciones de este tipo de servicio con un precio notoriamente bajo en relación con las tareas a desarrollar.