El uso de dispositivos GPS en los vehículos policiales comporta el tratamiento de datos personales y, por lo tanto, está sometido a la normativa de protección de datos personales. Si el tratamiento se lleva a cabo para asegurar el normal funcionamiento del servicio, el Ayuntamiento no necesitaría disponer del consentimiento previo de los afectados, peró sí que tendría que cumplir el deber de información y la obligación de creación (o modificación) y notificación del fichero que contenga los datos de geolocalización.